› Crónica ZZ Top. 13 de julio de 2011. Poble Espanyol. Barcelona.

Después de una espera de 14 años, volvían a Barcelona los grandiosos y veteranos tejanos barbudos ZZ Top. Y es que en sus más de 40 años de existencia no se han prodigado en exceso en la Ciudad Condal; tocaron en los ’90 en el Palau d´Esports y en Vall d´Hebron. Sin ningún disco nuevo que presentar, la banda está recorriendo Europa con un repertorio basado en sus grandes éxitos de los ‘70 y ‘80.
Esta vez el sitio elegido era el Poble Español, y menos mal que las nubes descargaron el día anterior, presentándose una tarde soleada pero sin el calor sofocante de otros días. Ya a primera hora de la tarde, las primeras Harley Davidson se dejaban oir por las inmediaciones de Montjuic, síntoma de que la hora del concierto se acercaba. Gente de todas las edades y tipologías iban haciendo cola ordenadamente en la entrada de las torres de Ávila, que a las 20:00 h en punto se abrieron para dejar acceder al personal.
Justo en la calle lateral estaban aparcados los 4 autobuses negros del grupo, uno para cada miembro de la banda y el cuarto para los técnicos. Durante la mañana se dejaron ver los dos miembros barbudos, Billy Gibbons y Dustin Hill, que firmaron autógrafos a los fans allí congregados. A destacar que el guitarra y cantante Billy Gibbons, con sus inseparables gafas oscuras y su estrafalario gorro, se dio un garbeo al mediodía por el Parque Güell. Nos contó el road manager que la semana próxima, cuando acabe la gira, Billy se quedará una semana en Madrid para realizar diversas visitas turísticas.


Y, después de unos teloneros barceloneses, con una puntualidad británica, a las 22:00 h empezaba el concierto de los ZZ Top. Un escenario sobrio, destacando la espectacular batería de Frank Beard en la parte central, con diversas calaveras en el bombo, y tres bafles a lado y lado colocados inclinados uno encima del otro en un espectacular equilibrio. Iniciando con una breve intro pregrabada, siguió el primer tema “Got Me Under Pressure”, que ya dejó la abarrotada plaza del Poble Español patas arriba; ¡que marcha la de estos veteranos!.
Y es que cuando un grupo tiene la calidad de estos tres pedazos de músicos, lo demás poco importa… Se nota que tienen el rock y el blues en la sangre. Salieron ataviados Billy con su gorro y Dustin con un sombrero vaquero, y con unos espectaculares ponchos que al acabar la canción, unas guapas chicas retiraron. Y, evidentemente, también con sus inseparables gafas oscuras.
Siguieron seguidos tal y como están en el álbum “Tres Hombres” los conocidos temas “Waitin’ For The Bus” y “Jesús Just Left Chicago”. Y tanto Billy como Dustin se alternaban en los micrófonos, aunque es Billy el que cantará la mayoría de los temas.
Cada vez que realizaban sus típicas coreografías bailando a la vez, el recinto se venia abajo. El juego de luces realzó mucho la espectacularidad del show, y el sonido, aunque extremadamente fuerte, fue suficientemente nítido, sobretodo con las guitarras de Gibbons.


Después de unas bromas en español de Billy, señalando lo feo que era el sombrero de Hill y antes del tema “Future Blues”, Billy pidió un sombrero para tocar blues, que le fue entregado por las chicas anteriores. Se lo colocó encima del gorro y ya no se lo quitó en el resto del concierto. El concierto siguió repasando temas clásicos, como “Cheap Sunglasses”, “My Head’s in Mississipi” y el clásico de Jimmy Hendrix “Hey Joe” que la banda dedicó al malogrado guitarrista. En uno de los temas, Billy entregó su púa a un roadie, el cual dio a una persona de la primera fila; Gibbons se situó en el escenario delante suyo y tocó un bonito solo con la mano izquierda, solamente pulsando las cuerdas, haciendo broma de que le faltaba la púa.
Encararon el final del concierto con los conocidos temas del disco “Eliminator” “Gimme All Your Lovin’”, “Sharp Dressed Man” y “Legs”.
Después de una breve pausa, iniciaron los bises con la esperadísima “La Grange”, auténtico himno de estos tejanos que ya se ha convertido en un clásico del rock universal, con su inconfundible riff de guitarra copiado hasta la saciedad, y acabaron con “Tush”. Después de casi hora y media de concierto y 18 temas, saludaron los tres músicos a la audiencia y se retiraron, dejándonos a todos exhaustos pero con ganas de más, de mucho mas.
Esperemos que no vuelvan a tardar tantos años en regresar a Barcelona, y mas con la edad que sus componentes tienen. Recordar que cada miembro de la banda tiene en la actualidad ¡62 años!. Y es que, al igual que bandas de su generación como The Rolling Stones o Motorhead, ZZ Top demuestra que la edad no es un impedimento y que, como los buenos vinos, ganan con los años. Y que mientras el cuerpo aguante, estaran descargando buen rock desde encima de un escenario. Y aquí los seguiremos esperando con los brazos abiertos.


Tx: Xavi Ramírez / Fotos: K


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Organiza: Riff Producciones.