› Crónica Volbeat + Iced Earth. 22 de octubre de 2013. Apolo. Barcelona.

Ya partíamos con unas expectativas de "SOLD OUT", y con eso ya sabríamos más o menos como iría encaminada la noche, y que se nos iba a presentar delante. Volbeat, una banda que ha explotado finalmente, y ese "Elvis Metal" que por fin se ha contagiado por todo el mundo, teniendo unas cifras impresionantes de asistencia por todos los rincones donde van, y no sería menos el otro día en Barcelona, donde fue la única ciudad en la que se colgó el cartel de máxima asistencia, quedando incluso entradas en taquilla, que volarían a los pocos minutos, y muchos de los que hacían cola se quedarían sin esta. A todo esto, y volviendo a lo musical, abrirían la velada Iced Earth, un grupo que me sorprendieron ya que, vuelven a Barcelona en breves, para ser mas concretos en Enero de 2014 de cabezas de cartel, y tuvimos la suerte de poder verlos también junto a Volbeat.

Iced Earth, una banda muy consolidada y con una trayectoria musical más que envidiable, únicamente con un miembro fundador, pero menuda caña que dieron. Momentos breves a la salida de Iced Earth, se abrieron las puertas de la sala Apolo y comenzó a entrar toda la gente que ya estaba colapsando por completo la acera de los alrededores de la sala, formando una cola brutal para antes de iniciarse el concierto. Al entrar en la sala, ya estaba todo el backline de Iced Earth al completo, y únicamente salieron los técnicos para acabar de revisar la afinación de las guitarras, ya que a los 15 minutos, saltarían a escenario los primeros de la noche.


Así bien, y con todo a punto, saltaron Iced Earth con muchísimas ganas y energía, para calentar a una sala, que como ya decimos, ya estaba llena hasta las trancas, en pista, y en la parte superior de la sala, donde la banda se encontraría con un panorama inmejorable para descargar su más que potente metal. Abrieron con el tema que da nombre a su más reciente álbum, llamado Plagues of Babylon, un tema muy contundente donde ya comenzarían muy fuerte, y el cantante ya comenzaría a hacer juegos con el público, que respondería a estos con mucho gusto, ya que esa noche, tenía pinta de ser una gran noche. Siguieron su show con otros temas como por ejemplo, Burning Times, If I could see you, Pure Evil y otros clásicos de la banda, donde sin parar ni un instante, seguirían dando caña a esos instrumentos para deleite de los asistentes.

Harían un parón al finalizar Watching Over Me, para tocar la última canción, llamada igual que la banda, Iced Earth, donde se despedirían por todo lo alto con una gran ovación en la que ya estarían los nervios a flor de piel, por escuchar a la banda que asaltaría el escenario en poco tiempo, los cabezas de cartel, una banda que pisaría nuestro país con un gran grupo elevado de fans que así lo demostraron en todo el concierto.


Mientras el escenario se iba preparando para Volbeat, me sorprendió un detalle que muy pocas veces había visto, y es el de utilizar alfombras personalizadas, ya que, como digo, he asistido a muchos conciertos, y nunca había visto algo así. Sin duda, estábamos ante una banda que ya había puesto punto y final a sus inicios, y ya se ha convertido en una banda a tener muy en cuenta, porque lo de esta gente va en serio, y lo están consiguiendo muy rápidamente. Venían a presentar su más reciente álbum, llamado "Outlaw gentlemen & shady ladies", pero como muchas bandas, no se olvidarían de tocar grandes clásicos, y es que, 19 canciones dan para mucho show, y para exprimir al máximo todo el potencial de la banda… ¡Y así fue! Saltaron al escenario tras una intro compuesta por el Born To Raise Hell de Motörhead, y la intro de su álbum, en la que al terminar, se veía a la banda sobre las tablas, tocando Hallelujah Goat, con el que todo el público se volcó hacia delante para poder estar mucho más cerca de las estrellas, y saltando y brincando desde los primeros acordes, y es que, volvemos a repetir, fue un concierto apoteósico.

Estos, hacía dos años que no sacaban disco, y presentaron parte de su discografía entre la cual no faltaron temas clásicos como son The Challenge, Khomaniac y Terror Squad. El show inicial se vio interrumpido con un problema en la guitarra, el cual se resolvió rápidamente y continuó el concierto tal y como estaba previsto.


Tras el primer solo de la canción, pararon y Poulsen, el gran frontman de la banda, calentó al público diciendo que si les gustaba eso que estaban oyendo, y toda la sala apolo, ya comenzó a dejarse la garganta en ese grito.
Finalizada esa canción, se quedarían un poco parados mirando para todos lados, y escuchando el unánime canto del nombre de la banda en la sala, y comenzarían con Guitar Gangsters & Cadillac Blood, otro tema que no correspondía a su nuevo álbum, con el que por tanto, era muy familiar para la gente que no estuviese muy habituada a su nuevo trabajo. Radio Girl sonó sin detenerse, para continuadamente tocar la primera canción de su nuevo álbum en esa noche, llamada The Nameless One, uno de los mejores temas de este nuevo trabajo con el que, como digo, todo continuaría sin detenerse y a tope.

Al terminar, público y Poulsen volvieron a entablar una conversación, y subiría la guitarra acústica sobre el escenario, para comenzar Sad Man’s Tongue, una canción que para los que la conocen, no hace falta que diga la importancia que tiene para la banda, y la repercusión en directo, os la imagináis, verdad? Una locura. Al terminar, y todo hay que decirlo, una banda muy activa y muy cercana con la gente, tanto el gran Rob Caggiano como Anders, el bajista de la banda, estarían en todo momento cerca del público transmitiendo ese sentimiento de cercanía, eso que tienen que tener todas las bandas para conectar desde el inicio con los asistentes, y tanto estos, como Poulsen lo consiguieron.


Sonaría Lola Montez al terminar Sad Man’s Tongue, y tras esta, otra vez temazos, Heaven nor Hell, coreada por todos con su máxima potencia de voz, y 16 Dollars, con los que se vieron pequeños "circle pits" por la sala, que montaría como no el vocalista de la banda, ya sabemos su pasado, y sabemos lo que le gusta! Seguiría un show espectacular con una energía que parecía que no acababa nunca por parte de los músicos, en el que sonarían temas como Fallen, Mirror and the Ripper, Maybellene y Hofteholder. Hasta que de golpe, comenzaría una parte del show que sería brutal, ya que el vocalista pediría grupos, y el público se los transmitiría, y ellos harían un pequeño cover, con los que sonaron Symphony of Destruction de Megadeth, Breaking the Law de Judas Priest,y como no, acompañando a la camiseta de Poulsen, Raining Blood de Slayer en conmemoración al difunto Jeff Hanneman que nos dejó no hace mucho. Finalizado este momentazo, sonaría, para mí, el gran tema de la banda: Still Counting. Un tema que acabaría de volcar la sala, que no se escucharía la voz de Poulsen, ya que ni cantaba, era el turno del público, de que el público cantase ese tema, y hasta el segundo trozo de la canción, la voz sería el gran público, que también hay que decir que lo hicieron genial.

Se retirarían del escenario con esa canción, para volver nuevamente, y acabar el show por todo lo alto. Doc Holiday con su intro, estarían sonando primeramente en esa parte final del show, con la que después vendría I Only want to be with you y Pool of Booze, Booze, Booza, con el que tras estos tres temas, la banda se despediría del público tirando a este toda clase de regalos y agradeciendo la asistencia de ellos por hacerles pasar a los músicos una gran noche, y es que, en conciertos como estos, tanto público como la banda tienen un papel fundamental en el desarrollo de la noche, y si cuentan con un apoyo mútuo, sale lo que sale, un conciertazo como este.

¡Muy grandes Volbeat! Esperamos que vuelvan pronto y vuelvan a petarlo como lo hicieron el pasado martes.

El setlist del concierto fue el siguiente:


Tx: Xavi Gutiérrez / Ft: K.

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Organiza: Madness Live! Productions